¿Recuerdas la primera vez que nos vimos? Yo la he recordado hoy. Y la semana pasada, y hace dos meses... Recuerdo perfectamente aquel momento porque no parabas de sonreír y era la sonrisa más bonita que había visto en toda mi vida. Cómo podía brillarle tanto a alguien el corazón, cómo podía alguien tener los ojos tan aniñados y, al mismo tiempo, la mirada tan salvajemente rasgada. Qué loca me volviste y qué locura tan bonita fue. Recuerdo que yo hablaba sin parar y tú me mirabas atónito sin mediar palabra. Recuerdo lo mucho que querías volar y que tenías en la espalda más de cien alas. Y que esa noche viajamos, porque hablar contigo era viajar y tú y yo queríamos comernos -y al mundo también-. Qué caricia tan suave puede ser a veces el pasado. Qué precioso es tenerte y probarte libre. Qué bonito saber que cuando te fuiste de mi estómago fue para mudarte al corazón. Qué utopía pensarte y decirte que las razones por las que te quise esa noche, siempre serán las razon...