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Mostrando entradas de marzo, 2014

Así nos va...

Que sí, que el desamor es una basura (por no llamarlo de otra manera), que lo pasas fatal, que te rompe por dentro, que pareces un alma en pena, que vas por los rincones llorando, echando de menos lo que un día echaste de más. Que sí, que estamos todos de acuerdo. Hasta que te vuelves a enamorar. Porque si, señores, nos volvemos a enamorar TODOS. Y entonces olvidamos los llantos, los rincones solitarios y lo que antes estaba roto ahora parece que tiene solución. Pero cómo se echa de menos el amor de verdad, ¿eh? El de "ponte guapa, estoy abajo esperándote", o el de "tengo ganas de ti, baja y te lo cuento", el de menos mensajes y más besos, el de lágrimas de alegría, el de hacer locuras que nadie entienda. El amor que te da los buenos días sin esperar nada a cambio, que te da sus mejores noches, el que deja notas por toda la casa diciéndote lo mucho que te quiere. El que todos deseamos, al fin y al cabo, pero que nadie hace nada por conseguir. Porque tenemos mie

It was you...

"El brillo de su piel en el cálido aire nocturno me enloquecía hasta el punto de sentir que los sentimientos se escapaban de mi cuerpo, huían de las prisiones en las que habían estado encerrados durante tanto tiempo. Sus ojos se posaron sobre mí, recorriendo cada rincón de mi cuerpo, para después bañarse en los míos. Ya no había nada que esconder, nos mirábamos sin limitaciones, sin rojeces en las mejillas, sin miradas que caen al suelo ni palabras absurdas para rellenar aquel cómplice silencio que se había establecido entre nosotros, ni siquiera las necesitábamos, solo queríamos de banda sonora nuestras respiraciones aceleradas: él era la exhalación, yo la inhalación, él trataba de tomar aire y yo se lo quitaba en un beso. La luna nos reclamaba, nos absorbía las ganas, nos tomaba, nos enredaba y nosotros nos entregamos a ella gustosamente sin el más mínimo ápice de duda. Y así acabamos la noche, cegando a las estrellas, y renacimos con el amanecer más jóvenes y libres que nu

Condiciones y términos de uso

Todos en la vida venimos con un montón de "Condiciones y términos de uso" que aceptamos sin ni siquiera haberlos leído, pero como no podemos cambiar las reglas, aceptamos sin más. Si prestásemos atención a lo que de verdad importa veríamos que hay normas sobre el AMOR. Dicen que no tenemos porque tener ese gran amor que todos esperamos, ni esa media naranja, sino que la única persona de la que deberíamos depender somos nosotros mismos. No tiene porque haber una persona que esté dispuesta a querernos solo porque nosotros la queramos. Aunque, eso sí, siempre hay que estar al pie del cañón para dar y recibir amor cuando la vida te lo concede. También hay una norma que habla sobre el TALENTO. Dice que no vale de nada el talento sin disciplina. Que trabajes, que trabajes y que te mates a trabajar. Solo tú decides si sigues o caes al suelo. Que no existe la palabra FRACASO . Otra regla habla sobre la FELICIDAD y nos viene a decir que la felicidad no es una meta, no es el final

Inexplicable, como todo lo que nos hace felices

"Cada vez que conoces a alguien tu vida cambia y, tanto si te gusta como si no, nosotros nos hemos encontrado, yo he entrado en tu vida y tu en la mía". Ojalá llegue el día en el que no tengamos que dormir para soñar. Porque sí, porque la vida es muy puta y nadie muere virgen. Y de repente llegas tú, como sabiendo que te estaba esperando cuando en realidad lo que estaba haciendo era conformarme con lo que tenía. Y me preguntaban si era capaz de hablar del amor contigo. Lo primero es que del amor no se habla, simplemente se hace. Lo segundo es que la mejor forma de hablar del amor es callándose, como queriendo decir "nada de lo que diga estará a la altura de lo que siento". Así que me quedo sin palabras cada vez que veo la curva de tu sonrisa o el precipicio de tu cuello por el que me tiré hace tiempo. Porque tú eres la persona que hace que me recuerde a mí misma y por la que perdería mil trenes con tal de quedarme contigo un ratito más. Que como ya sabes, un