Ir al contenido principal

Si me buscaras ahora, me encontrarías


Es malo echar de menos, pero aún peor es echar de menos a alguien que todavía sigue a tu lado. Nunca te acostumbras a esa sensación de caída libre, esperas el golpe contra el suelo, pero nunca llega. A veces sientes que alguien intenta ayudarte, cogerte al vuelo. Y esa es justo la persona que sabes que haré lo que sea por ti, pero que no podrá soportar tu peso durante mucho tiempo. Sabes que te dejará caer. Y tú no puedes hacer nada para evitarlo. No puedes aferrarte a él porque también está cayendo precipitadamente al vacío. Pero nosotros somos esos locos que no ven que nos vamos a destrozar. Seguimos cogidos sabiendo que algo malo está a punto de pasar, aunque no queramos verlo. Porque ya se sabe: la felicidad es una forma cruel que tiene la tristeza de apuñalarnos por la espalda. Y es que el pasado es algo así como ir barriendo toda la mierda debajo de la alfombra hasta que no puedes evitar tropezarte con ella. Hay veces que la vida te coloca en el sitio adecuado para que todo encaje, pero a veces lo hace a destiempo: demasiado tarde o... quizá demasiado pronto.
Aún así, aunque sigamos cayendo, permanezco a tu lado. Quiero sentir cómo se te llenan los pulmones de aire, notar esa plenitud en tu pecho. Y decirte una y otra vez que me mires como siempre lo has estado haciendo: "mírame como si te acabara de echar el mejor polvo de tu vida. Mírame como solo tú sabes".

Comentarios

  1. Hola: ^^
    ¡Qué bonito, Sonia! Ya solamente con la primera frase, con la que me he sentido tremendamente identificada, me has introducido una especie de intriga y no he podido evitar seguir leyendo. Tengo que decirte que es una entrada preciosa, en serio, desde la primera frase hasta la última (que, por cierto, también me encantó). Describes muy bien esa sensación de sentir a alguien a años luz a pesar de que esté muy cerca, y seguir queriendo amar a esa persona aunque sepamos con certeza que nos va a destrozar. También me encantaron las descripciones que haces de la felicidad y del pasado, ¡parecen de libro! Así que ya sabes, si alguna vez sacas un libro cuenta conmigo como lectora.
    Es todo un placer regresar a este rinconcito tan agradable.

    Besos,
    Windflower.

    ResponderEliminar
  2. ¡¡Me he enamorado de este texto!! *-*
    Es precioso, joder.

    Un beso! ;)
    http://myworldlai.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  3. Me gustó mucho mucho el texto, es muy bonito, a veces lo único que queda es disfrutar de la caída!

    ResponderEliminar
  4. La primera frase, que gran verdad...! Como siempre me encantan tus textos.
    Un beso Sonia!

    Lucia Gallego Blog

    ResponderEliminar
  5. que buena reflexión, me encantan las fotos

    www.lessismoreblog.com

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

If I lose myself...

Algo en la forma que tienes de mirarme hace que me sienta como si no pudiese vivir sin ti. Desde un principio robaste mi corazón y soy tu víctima voluntaria. Te permití ver cada parte de mí, y cada vez que me tocas está escrito en las estrellas y en las cicatrices de nuestros corazones. Si me pierdo... va a ser a tu lado.

Make me immortal with a kiss

Hoy puedo decir con una gran sonrisa en la boca que soy feliz y lo soy gracias a ti. Me he acostumbrado a tus sonrisas, tus besos, tus ojos mirándome, tu manos acariciando mi cuerpo, mis suspiros por desearte de esta manera, tu cara, tu cuerpo, mi corazón desenfrenado que se acelera cuando estás tan cerca... Siento como mi cuerpo se excita, siento la adrenalina: quiero gritar que te quiero, pero me guardo las palabras para susurrartelas al oído. El tiempo se va, veo las estaciones que pasan por mi ventana y tu y yo seguimos aquí. Igual que el Sol sale todas las mañanas, sin ninguna excepción, yo me despierto radiante porque sé que para ti soy tan o más importante que la estrella que nos enciende los días. Tú eres mi constelación de Orión, mi vía  Láctea, mi Luna, mi cielo, mi infinito... Me has enseñado a vivir, a reírme cuando quiero llorar, a llorar cuando no paro de reír, a darle importancia a los pequeños detalles, que los mejores besos son los que no te esperas, que mi nombre...

Night

Noche fría, lluviosa. Sábanas empadadas de sudor. Pesadillas que vuelan a mi mente, que me atormentan los sueños. Abro los ojos. Estoy llorando. En mi sueño te alejabas para siempre mientras yo intentaba impedírtelo. Me he dado cuenta de que estoy destapada. Miro a un lado y te veo. Tienes todas las sábanas. Duermes plácidamente y tu respiración es acompasada. Sonrío. Vuelvo a cerrar los ojos y me acurruco a tu lado. Quitame el frío. Quítame las noches y dame tus buenos días. Stop the clocks.