Seguro que nunca has oído algo así como "la lluvia solo es bonita para los que tienen casa" Yo con "casa" me refiero a personas. Da igual que fuera se esté cayendo el cielo. Tú estás con esa persona que te dice que no lo estás haciendo tan mal y con eso ya
te lo tiras. Aunque claro, mejor quedarse con aquel que quiera ir contigo a la raíz de los problemas; que taparlos sabemos todos. Que si, que hay veces que si me dices ven
(con sexo a diario), lo dejo todo. Porque no sé qué demonios quieres, pero yo los tengo todos. Y a pesar de ello, me apetece estar contigo porque quiero tu abrazo como punto de partida para empezar. ¿Empezar qué? Da igual. El día, la semana o la vida entera. Bastante me hicieron sentir aquellos que me quitaron las dudas y ahora llegas tú, tan lleno de tiempo y con algo de prisa, y ya no me interesa ni mi propia seguridad. Solo me acojona no volver a verte. Quiero saborear el paso de los días, quiero que el riesgo se apodere de nosotros mientras te cuento que un instante transmite más que algo periódico. Susurrarte, como siempre, "quédate" y saber que no lo harás. Resultó ser cierto, es necesario insistir en los errores, porque arrepentirse de lo vivido sería como tachar toda mi autobiografía. Y ya te digo, tengo ganas de que te quedes aunque estemos asombrosamente cerca el uno
del otro.
"Porque no sé qué demonios quieres, pero yo los tengo todos".
ResponderEliminarCon el final ya me quedo para siempre.